“Amigos, el tiempo no espera a nadie. Sigue adelante y sigue así. No se detiene para nada ni para nadie. No importa cuánto dinero tienes, cuánto poder tienes, o cuanto prestifio – el tiempo sigue su rumbo; por lo tanto, tienes que respetarlo y usarlo sabiamente, porque al tiempo no le importa quién eres. El tiempo es el gran ecualizador. Desde su punto de vista, todos somos iguales. Le da los mismos dividendos a los ricos y los pobres, a los poderosos y a los débiles, a los grandes y a los pequeños. Todo el mundo tiene la misma cantidad de tiempo, veinticuatro horas por día, ni un minuto más. La clave del éxito no es el tiempo que tienes. La clave es lo que haces con el tiempo con el tiempo que tienes. ¿Cómo utilizas tu tiempo? ¿Lo usas sabiamente, o desperdicias tus preciosos minutos? ¿Llenas tu vida con desperdicio de tiempo, o llenas tu tiempo construyendo tu vida? Tu éxito o tu fracaso dependen de cómo utilizas tu tiempo. Este se mueve…¿Y tú?

Cada minuto es precioso porque no se puede reemplazar. Una vez que se ha gastado el día, no podemos cambiar el tiempo que ha pasado. Cada día es una unidad de tiempo individual y no puede ser revivido. Una vez que se va, se acaba, entonces lo debemos usar sabiamente, porque no tenemos garantía de cuánto tiempo tenemos en esta tierra.

3 comments
  1. Este libro tiene un mensaje realmente maravilloso. Me ha dado impulso en mis proyectos de vida. Gracias por el libro.

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