LA VENTANA Y EL ESPEJO

Un joven muy rico fue a ver a un rabino y le pidió consejo para orientar su vida. Este lo condujo hacia la ventana y le preguntó:

* ¿Qué ves a través de los vidrios?
* Veo hombres que van y vienen, y un ciego que pide limosna en la calle.

Entonces el rabino le mostró un gran espejo y nuevamente lo interrogó:

* Mira este espejo y dime ahora qué ves.
* Me veo a mí mismo.
* ¡Y ya no ves a los otros! Repara en que la ventana y el espejo están hechos ambos de la misma materia prima, el vidrio: pero en el espejo, porque tiene una fina lámina de plata pegada al vidrio, no ves más que tu persona. Debes compararte a estas dos especies de vidrio. Pobre, veías a los otros y sentías compasión por ellos. Cubierto de plata -rico-, apenas te ves a tí mismo. Sólo valdrás algo cuando tengas el coraje de arrancar el revestimiento de plata que te cubre los ojos y puedas nuevamente ver y amar a los demás.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

You May Also Like

Matar la creatividad

La creatividad, madre de la innovación, es una cualidad escasa que se…

El rey y la semilla

En un pueblo lejano, el rey convocó a todos los jóvenes a…

El infierno

Todo un grupo de gente murió al mismo tiempo en una catástrofe…

Cómo nos afecta la Soberbia

¿Cómo nos afecta la soberbia a nosotros y a quienes nos rodean?…