Aun que suene como de canción
hoy voy a cambiar, retomar mi ideal
de ser ese hombre sensible e intelectual,
que abandone por conformismo,
aceptar que tengo miedo, miedo de volver a errar,
manejar un inteligencia emocional optima para evitar
dañar a alguien más.
Porque miedo no a la muerte, no al delito,
si al fracaso y al olvido.
Al olvido de mi mismo, de mi esencia,
de lo que me mantiene vivo.
Porque hombre es aquel que acepta rosas,
chocolates y muchos otros detalles
sin bochornos, sin prejuicios,
siempre con la frente en alto dichoso
de ser amado y amante.

“Al primer amor se lo quiere más, a los otros se los quiere mejor” Antoine de Saint-Exúpery (Escritor del Principito)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

You May Also Like

Una rosa en el desierto

A menudo la voz apacible del maestro espiritual quebraba el silencio perfecto…

El Rostro del Amor

¡OH si!, lo he visto. El rostro del amor, Lleva un par…

El Dragon – rodrigo solis

Ahí tienen que una vez llegó un dragón a alguna parte y,…

No tengo crema

Del anecdotario de cada cada persona podemos aprender valiosas lecciones; cada día…